Cada usuario es responsable de los objetos personales que introduce en la biblioteca y de su vigilancia. Puedes comunicar su pérdida o robo en los mostradores de préstamo, donde estaría depositado el objeto en caso de que apareciera. También puedes dar aviso en Conserjería. Te aconsejamos que no dejes ningún objeto personal de valor (ordenador portátil, calculadora, cartera...) sin custodia.